sábado, 4 de julio de 2020

Personal Assistant (The High Note 2020)


No iba con mucho convencimiento a ver Personal Assistant, el filme dirigido para el cine por la canadiense Nisha Ganatra y al que le ha tocado la mala suerte de la pandemia, con asistencia muy limitada todavía a los cines. El filme se ha estrenado en las salas en España, pero lo hizo bajo demanda en los Estados Unidos a finales de mayo. Si la sala en que la ves tiene buen sonido (ha sido mi caso), merece la pena disfrutarla en sala.
Si en la semana anterior estaba yo solo viendo la película, en esta ocasión estábamos tres, lo que visto lo visto es un gran avance. La estrategia de reponer películas y estrenar algunas que se quedaron en el tintero desde marzo puede animar algo a la gente, pero no es fácil cuando el calor anima a salir al campo. La verdad es que con estos números iniciales, la sala es un lugar tranquilo y la posible ansiedad se disipa pronto. En realidad, te sientes menos presionando que cuando haces la compra.
La verdad es que la hora y 53 minutos de duración de esta comedia sobre los artistas, la la edad, presión competitiva del género e incluso aspectos étnicos tenía con visión preclara todos los temas que están en este momento sobre la mesa de las discusiones sociales en todo el mapa terráqueo.


La directora Nisha Ganatra proviene de la televisión y ha conseguido un producto visual muy competente, manejándose bien en los terrenos intimistas de la comedia y los musicales del espectáculo.
Envuelta en magníficos números musicales (ya hablaremos de esto), se nos ofrece una comedia dramática sobre la ambición sobre lo malo que es la falta de sinceridad (léase engaño). Como sucede en la comedia clásica, los enredos se producen cuando nadie es lo que dice y nadie está a gusto con lo que es.
Ganatra se maneja bien en los dos tonos de la comedia, con una buena fotografía que le da empaque al filme, bien montado como espectáculo que muestra el espectáculo. Está bien llevado el ritmo para que no se produzcan parones, un riesgo en ocasiones con los musicales. Aquí no estamos ante el género, sino ante la trama de los cantantes, los productores, los ingenieros de sonido, etc. La música forma parte de sus vidas y de sus trabajos. En este sentido, a la música original se le suma una magnífica selección temas sobre los que hablan y se cuela en nosotros, es la que ha influido en sus vidas, sus referencias sonoras vitales.


Son varias las tramas que se entrecruzan. La superior es la que trata sobre el arte (cualquiera de ellos) y sobre si se puede vivir de las rentas. También sobre la distancia entre el artista verdadero y aquellos que quieren ir a lo seguro frenando la evolución personal y la del mismo arte. Es, en este sentido, un deseo de renacimiento por parte de la artista Grace Davis, la estrella, interpretada extraordinariamente por la gran actriz (y directora, guionista, productora y más cosas) Tracee Ellis Ross. Verla y escucharla en la pantalla es una delicia para la vista y para el oído. Los números musicales, especialmente los últimos, son canciones que disputarán el Oscar a cualquier otra que aparezca en el año. Una gran interpretación la suya en todas las dimensiones. 
Es una demostración de la maldad del propio sistema que esta mujer no haya trabajado más en el cine. Espero que lo haga. Los premios logrados en la Televisión merecen ampliarse al cine. Aquí luce espléndida en todos los órdenes, incluido el vestuario de estrella muestra.
En el otro lado está su "asistente personal", Maggie, interpretado por Dakota Johnson, en un personaje deseoso de salir de la oscuridad y saltarse a tareas para las que evidentemente está más cualificada, la producción entre otras.
El conflicto dramático real, en el siguiente nivel, se esconde en el conflicto entre estados dos mujeres y el intento de Maggie de que Grace Davis, la estrella, vuelva a brillar más allá de las rentas y lo fácil, representado por un retiro en Las Vegas, con años asegurados de beneficios por repetir lo mismo.


El tercer elemento será David Cliff, un cantante interpretado por Kelvin Harrison Jr, aquejado de pánico al éxito, un joven inseguro. Su interpretación está a la altura, tanto en lo musical como en lo dramático. Son buenas sus interacciones con Dakota Johnson y nos permite conocer la cara de la ambición de su personaje, el deseo de descubrir y lanzar a una estrella, el sueño de todo productor hasta que se reduce a solo sacra dinero.
La trama de la película está dividida entre esos dos mundos, el de Gina y el de los jóvenes con sus dudas y miedos. Los giros finales nos ayudan a comprender mejor a los personajes y a escuchar unos números fantásticos.
No se puede ignorar el papel de la música, de las viejas grabaciones añoradas de una época en la que era posible hacer música diferente, personal y no quedar en manos de una industria repetitiva y facilona, que explota el sentir de los aficionados cristalizando al artista como una pieza del mercado. En este sentido, si hay un villano, es la industria, maquinaria insensible y en busca del beneficio. En este sentido hay varios personajes que se nos muestran como auténticas caricaturas.


Para los amantes de la vieja música, de los 60, 70, 80 y 90, el oído es adulado con canciones y portadas de discos que, yo al menos, tengo en mi trastero. Sam Cook, Fleetwood Mac, los primeros discos del Boss o canciones de Cat Stevens. Se habla de ellos y de otros músicos, a veces con juegos y bromas, como un mundo pasado, pero más vivo que la moribunda industria que busca eternizarse en un casino de Las Vegas convertido en cementerio de estrellas.
No sé si los que no conozcan esta música —o no les importe— verán la misma película que yo he visto, pero creo que puede apreciarse como un añadido a un filme sólido, bien interpretado y con unos números musicales de gran calidad. Es una historia (o una mezcla de historias) ya contada, pero ¿qué historia no lo es? Cumple sobradamente sus objetivos.
J.A.


Personal Assistant (The High Note 2020)   
Directora: Nisha Ganatra
Guionista: Flora Greeson
Intérpretes: Dakota Johnson, Tracee Ellis Ross, Kelvin Harrison Jr., Bill Pullman, Zoe Chao, Ice Cube

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